En determinadas ocasiones el cuidado de los pequeños puede resultar agotador. El día a día de muchas mamás y papás puede ser complicado: atender a las necesidades de los hijos, hacer frente a sus rabietas, a niños nerviosos, los deberes, etc… Llevar una casa, y atender las obligaciones laborales… puede conllevar alteraciones en el bienestar de las madres y padres y provocar lo que se conoce como síndrome de burnout.
El Síndrome de burnout.
El síndrome de burnout, es el síndrome del cuidador quemado. Se produce cuando los papás y/o mamás experimentan una sobrecarga. El síndrome de burnout se manifiesta cuando aparece la sensación de no tener tiempo para uno mismo, de no disponer de un segundo ni para ir al baño solo, enfados frecuentes, ganas de llorar,….
El síndrome de burnout ocurre cuando una persona está sometida a un estrés constante y continuado, sus consecuencias pueden ser muy perjudiciales para el bienestar físico y psíquico del cuidador, así como para el de la familia.
Es fundamental prestar atención a los síntomas del síndrome de burnout para poder hacerle frente y evitar así sus efectos negativos.
Los niños y niñas no necesitan madres y padres perfectos, si madres y padres que les contagien bienestar.
Síntomas del síndrome de burnout.
Los síntomas que pueden alertarnos de la presencia del síndrome de burnout o sobrecarga de los padres, son los siguientes:
- Actitud indiferente y negativa: perdida de interés por las actividades favoritas.
- Aislamiento social.
- Enfermedades frecuentes y dolor crónico.
- Dificultad para concentrarse.
- Cambios en los patrones del sueño.
- Cambios en el apetito y en el peso.
- Sentimientos en el apetito y en el peso.
- Consumo inadecuado de alcohol y/o medicamentos.
- Sentimientos de desesperación, impotencia.
- Estrés, ansiedad, intensos.
- Ganas de llorar sin razón aparente.
¿Por qué se produce el síndrome de burnout?
El síndrome de burnout, se caracteriza por la sobrecarga y tiene como consecuencia lo que comúnmente llamamos estar quemado. Cuando una persona se sobrecarga por encima de sus posibilidades (posibilidades normales de cualquier persona), aparece la respuesta de estrés. Cuando estamos demasiado tiempo sometidos a estrés y al cansancio, surge el agotamiento y nuestra mente y nuestro cuerpo se niegan a continuar. El síndrome son las respuestas del cuerpo que nos dice “para, necesitas descansar”.
El síndrome de burnout, sin el tratamiento adecuado puede interferir en el día a día de los afectados, impidiendo que lleguen a desenvolverse de una manera adecuada.
¿Qué podemos hacer ante el síndrome de burnout?
Por suerte, el síndrome de burnout puede evitarse sin demasiadas complicaciones y puede tratarse para una rápida recuperación. Veamos algunas recomendaciones para evitar sentirnos quemados, para prevenir y tratar el síndrome de burnout.
- Ante cualquier síntoma consulta a un especialista y/o el médico, para que pueda apórtate el tratamiento más adecuado.
- Aprende a gestionar tu tiempo y a organizar tus tareas. En muchas ocasiones una falta de organización es la causa del agotamiento.
- Pide ayuda a familiares y amigos.
- Cuando lo necesites delega en otras personas funciones relacionadas con el cuidado de tus hijos. Son muchos los familiares a los que seguro que puedes recurrir y estarán encantados de ocuparse de los niños durante un rato.
- Procura llevar un estilo de vida saludable que ayude a combatir y prevenir el estrés: ejercicio, rutina de sueño, alimentación, etc.
- Dedica un tiempo para ti misma/o. Es bueno tener un tiempo para uno mismo, que nos permita desconectar y centrarnos en nosotros mismos. Puedes dedicarlo a un hobbie, vida social, etc.
- Aprende a decir no y respeta tus límites para que los demás los respeten.
- Busca alguna actividad relajante e introdúcela como rutina en tu día a día: meditación, yoga, leer un libro, charlar, etc.
No hay comentarios:
Publicar un comentario