“Tenga claro que este mundo es virtual mas no irreal, detalle que hay que tener muy presente, pues a ratos podemos perder el norte y pensar que con un clic se borra lo dicho”.
Le parece interesante la última columna. Solo que a ratos no entiende bien de qué mismo le hablo. Ese comentario de un lector sincero provocó en mí la intención de detenerme, dar retro y hacer algo más didáctico, algo para los que se consideran poco conocedores de las redes sociales.
Así que los internautas expertos pasen de página si quieren, pues este texto puede resultar demasiado básico y aburridor. Hoy les toca el turno a los que por primera vez quieren emprender el viaje al mundo virtual.
Partiendo de la premisa de que los principiantes saben encender una computadora, entrar a un navegador de internet y tener una dirección de correo electrónico, hago el salto directo a las redes sociales.
Existe el famoso Facebook, aquel sitio que ha reemplazado a los álbumes de fotos impresos, a los diarios personales y los periódicos murales. Si a usted lo que le interesa es entrar en contacto con viejos amigos y parientes dispersos por el mundo, esta es la red ideal.
Aunque desde hace algún tiempo se venga diciendo que el Facebook ha perdido terreno, los smartphones y los nostálgicos lo mantienen vivo. Lo que a muchos gusta es la posibilidad de poner en tiempo real desde el celular una foto, un mensaje, chatear con alguien o revisar noticias que para uno resulten importantes, que bien puede ser que el nieto perdió un diente o que hubo un sismo en Centroamérica.
El Facebook es ese periódico entre panas, escrito y leído por personas a quienes más o menos conocemos.
El Twitter es la otra red que más suena. Personalmente le encontré sentido cuando hallé cuentas que me aportaban algo, ya sea información o soluciones a cosas que a mí me importaban.
Esta red social es un infinito índice de contenido de noticias que permite a los internautas encontrar con mayor facilidad lo que a ellos les interesa, independientemente del medio que lo divulgue. Hay quienes la usan para bromear, socializar con conocidos, desconocidos, personajes famosos, marcas comerciales y hasta entidades que dan servicio público.
El teléfono deja de tener sentido cuando se quiere llamar a reportar un daño a la Eléctrica, por ejemplo, pues a través de @electricagquil la respuesta es inmediata. Las marcas comerciales, preocupadas de lo que sus consumidores opinan de ellas, monitorean lo que se les escribe y toman cartas en el asunto. El Twitter pasa a ser un medio directo para comunicarnos con quienes antes pensábamos que eran inaccesibles.
Otra red que puede interesarle a un novato es www. youtube.com, si es que le interesa compartir videos. Muchos solo la usan para verlos, sin necesidad de registrarse en la red.
www. Flickr es algo parecido, pero lo que se comparte es fotografías. Navegar por esta red puede ser un verdadero deleite y nos sirve para darnos cuenta de que, como dice Alton Ego, personaje de la película Rataouille, el arte puede provenir de cualquier parte.
Tenga claro que este mundo es virtual mas no irreal, detalle que hay que tener muy presente, pues a ratos podemos perder el norte y pensar que con un clic se borra lo dicho. No es así. Grandes escándalos familiares, políticos y sociales se han generado por esto.
La conciencia ayudará a los principiantes a tropezar menos y aprovechar más las nuevas posibilidades de interacción.
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